La visión de la Alianza Mundial del Agua es para un mundo seguro del agua. Nuestra misión es apoyar el desarrollo sostenible y la gestión de los recursos hídricos en todos los niveles. GWP cree que un enfoque integrado para administrar los recursos hídricos del mundo es la mejor manera de perseguir esta visión, una visión que abarca toda la vida. El GWP toma sus principios rectores de las declaraciones de Dublín y Río (1992), de la Asamblea del Milenio (2000), que dieron lugar a los Objetivos de Desarrollo del Milenio, y del Plan de Acción de la Cumbre Mundial sobre el Desarrollo Sostenible (2002), que estableció una meta para la preparación de planes de IWRM y Eficiencia Hídrica. Con el tiempo, GWP ha adaptado y elaborado estos principios para reflejar la comprensión internacional de la «gestión equitativa y eficiente y el uso sostenible del agua». Los principios rectores son: El agua dulce es un recurso finito y vulnerable, esencial para sostener la vida, el desarrollo y el medio ambiente. El desarrollo y la gestión de los recursos hídricos deben basarse en un enfoque participativo en el que participen usuarios, planificadores y responsables políticos a todos los niveles. Las mujeres desempeñan un papel central en el suministro, la gestión y la protección del agua. El agua es un bien público y tiene un valor social y económico en todos sus usos competidores. La gestión integrada de los recursos hídricos se basa en la gestión equitativa y eficiente y el uso sostenible del agua y reconoce que el agua es una parte integral del ecosistema, un recurso natural y un bien social y económico, cuya cantidad y calidad determinan la naturaleza de su utilización.