El índice de resiliencia: Evaluación de la capacidad de adaptación de la acuicultura para la toma de decisiones informada

Aprendizajes clave

Acerca de la Región

Amenazas climáticas

Galicia se enfrenta a condiciones climáticas cada vez más extremas, con tormentas invernales más frecuentes e intensas que causan daños a las balsas de mejillones y la infraestructura portuaria. En verano, las olas de calor elevan la temperatura del agua, provocando floraciones de algas nocivas que reducen la disponibilidad de semillas de mejillón. La acidificación del océano, debido a la sobresaturación de los carbonatos en las aguas de la costa gallega, también puede afectar el crecimiento y la supervivencia de las especies de mariscos. Estos peligros amenazan significativamente el sector de la acuicultura de mejillones y la estabilidad socioeconómica más amplia de la región.

Índice de resiliencia: Abordar los desafíos de adaptación en la acuicultura de mejillones

Participación de las partes interesadas y los expertos: Hacia una herramienta común de apoyo a la toma de decisiones

El desarrollo del índice de resiliencia se caracterizó desde el principio por un fuerte compromiso de colaboración con las partes interesadas y los expertos regionales, incluidos representantes del Gobierno regional, el mundo académico, el sector de la producción de mejillones y las organizaciones sociales y medioambientales. Los talleres aseguraron que el índice fuera científicamente riguroso, aplicable en la práctica y ampliamente aceptado por los usuarios potenciales.

Las contribuciones de las partes interesadas fueron esenciales para identificar escenarios de riesgo prioritario para la acuicultura de mejillones, calcular el potencial para mitigar esos riesgos y evaluar la capacidad de adaptación del sector. Estos insumos se integraron como variables y valores a la fórmula del Índice de Resiliencia.

El desarrollo del Índice de Resiliencia se basa en la colaboración constructiva entre el conocimiento científico y la experiencia de la industria. Esta sinergia permite avanzar en la mejora de la gestión de la producción de mejillones, lo que resulta en una mayor eficiencia y sostenibilidad.

Alfonso Villares, Consejero de Mar de la Xunta de Galicia.

Cálculo del índice de resiliencia: Un chequeo de la capacidad de adaptación

Las consultas con los principales actores de la acuicultura de mejillones identificaron y priorizaron las vulnerabilidades, los riesgos y los factores de resiliencia cruciales para adaptar la producción al cambio climático. El índice de resiliencia es un «chequeo» de la capacidad de adaptación del sector. Señala dónde la adaptación al cambio climático requiere esfuerzos y recursos específicos para aumentar significativamente la resiliencia del sector.

La Figura 2 resume los resultados del Índice de Resiliencia para todo el sector mejillón de la Ría de Arousa. El estuario se encuentra en la región de Galicia y alberga alrededor del 70% de las balsas de mejillones gallegas. La gestión de riesgos es la dimensión de resiliencia menos desarrollada, con un nivel de capacidad de adaptación del 36%. Dentro de esta dimensión, los planes de acción de emergencia son el factor de resiliencia menos desarrollado. Sin embargo, para definir una hoja de ruta estratégica para mejorar la capacidad de adaptación, es esencial tener en cuenta el nivel de rendimiento de los factores de resiliencia y su peso dentro del modelo general de resiliencia. El equipo del proyecto consideró los factores de resiliencia con un nivel de rendimiento inferior al 50% y un peso total de resiliencia superior al 5%.

Más allá de los números: Priorización adaptada de las acciones de adaptación para una hoja de ruta estratégica

Con los criterios de priorización establecidos, el equipo del proyecto identificó seis líneas de acción para abordar los desafíos a los que se enfrenta la acuicultura de mejillones en Galicia. Estas líneas de acción deberían:

1. flexibilizar los procedimientos de producción,
2. Abrir nuevos canales de comunicación entre las partes interesadas,
3. Incorporar técnicas innovadoras en la producción de mejillones,
4. Integrar la acuicultura de mejillones en el contexto ecosistémico más amplio en el que tiene lugar.
5. Mejorar los modelos para predecir los cambios en las variables oceánicas y meteorológicas, y
6. Apoyo al diseño de planes de contingencia para emergencias causadas por los efectos del cambio climático

Además, el equipo del proyecto dividió estas líneas de acción en 24 propuestas de acción (cuatro por cada línea). Durante un taller de partes interesadas y expertos, los participantes utilizaron este ejercicio de priorización para elaborar una hoja de ruta estratégica para la acuicultura de mejillones, destacando las acciones más importantes y urgentes:

• Énfasis en mejorar la recopilación sistemática y a largo plazo de datos oceánicos, meteorológicos y ambientales con sensores asequibles y fáciles de implementar.
• Desarrollo y adopción de herramientas analíticas predictivas para la anticipación de eventos futuros.
• Mejora de los flujos de información a lo largo de la cadena de suministro.
• Promoción de la innovación a través de nuevas tecnologías y proyectos colaborativos.

Este diálogo colaborativo estableció un marco de acción, proporcionando una referencia para futuros programas que integran avances científicos y procesos de consulta a largo plazo. En una encuesta, el 72% de los participantes involucrados en la hoja de ruta estratégica indicaron que su conciencia sobre el cambio climático aumentó después de conocer los resultados del Índice de Resiliencia. Además, el 89% declaró que consideraría las ideas del Índice de Resiliencia en futuros procesos de toma de decisiones.

Resumen

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